miércoles, 7 de enero de 2015

La mitosis

La mitosis es un proceso de reproducción celular que ocurre en células eucariotas (con núcleo definido), por el cual una célula madre se divide dando lugar a nuevas células, llamadas células hijas, que son genéticamente iguales a la célula madre.

Para ello, lo primero que sucede es que la célula madre aumenta de tamaño y duplica su material genético (ADN). A este proceso se le conoce como ‘interfase’. Tras el cual, se produce la mitosis propiamente dicha, que consta de cuatro fases:

1- Profase. En el núcleo de las células eucariotas, el ADN se encuentra rodeado proteínas que forman una maraña de fibras que recibe el nombre de cromatina. Durante la profase, estas fibras se agrupan y forman unas estructuras llamadas cromosomas.
2- Metafase. Durante esta fase, los cromosomas se sitúan en la zona central de la célula eucariota. 
3- Anafase. Es la etapa en la que cada una de las unidades que componen los  cromosomas (llamadas cromátidas) se separan. 
4-Telofase. Por último, las cromátidas ya divididas se dirigen hacia dos extremos opuestos   de la célula.

Una vez concluido este proceso, el citoplasma de la célula se divide dando lugar a las dos células hijas, conociéndose a esta división como ‘citocinesis’.

Este mecanismo es muy importante ya que permite que otros procesos biológicos se lleven a cabo, como el desarrollo, el crecimiento, y la reparación y renovación de tejidos.





lunes, 5 de enero de 2015

El microscopio

El microscopio es el instrumento con el que llevamos a cabo la observación de pequeñas estructuras, por debajo de la capacidad de visión del ojo humano. Como os comenté en un post anterior, el primer microscopio se le atribuye a Antón Von Leeuwenhoe, el cual constaba de unos 200 aumentos.
Gracias a esta herramienta podemos observar  células vivas y en movimiento, aunque es mucho más sencillo observar células si se encuentran fijas y teñidas. Además, hoy día existe una gran variedad de los mismos, dividiéndose a su vez en ópticos y digitales. Y con una gran cantidad de aumentos, para poder ver y analizar todo tipo de muestras.

Para conocer el número de aumentos de un microscopio óptico, mira el ocular y verás el número de aumentos que posee indicados mediante un signo “x”, seguido de un número. Por ejemplo, “x5” nos indica que el ocular tiene 5 aumentos. De igual modo, si te fijas en el objetivo, por ejemplo,  “x10” nos indica que el objetivo tiene 10 aumentos; y multiplicando los aumentos del ocular por los del objetivo obtendrás el número de aumentos total utilizado para observar una muestra. En nuestro caso sería de 50 aumentos (5x10=50).

En cuanto a las principales partes de un microscopio óptico son:
-BASE: Sirve de sujeción para todo el microscopio.
-CONDENSADOR: Es la lente que concentra los rayos luminosos sobre la preparación.
-FOCO: Sirve para enfocar el objetivo, para tener mejor nitidez y observar los detalles, puesto  que    dirige los rayos luminosos hacia el condensador.
-OBJETIVO: Lente situada cerca de la preparación que amplía la imagen de ésta.
-OCULAR: es el lugar donde sitúas los ojos para ver la muestra.
-LENTES: Están justo encima del objetivo. Según el modelo de microscopio puede tener un revolver,  con distintos aumentos.
-REVÓLVER: Contiene los sistemas de lentes objetivos. De modo que puedas seleccionar el que más  te convenga en cada ocasión.
-PLATINA: Es el lugar donde se deposita la preparación.

Por último os dejo una página web, donde podéis acceder haciendo 'click' en este enlace. Está en inglés, pero es muy intuitiva. En ella podréis hacer prácticas virtualmente con un microscopio óptico y ver distintos tipos de muestra.




sábado, 3 de enero de 2015

Función de relación: "ecolocación"

La función de relación es el conjunto de procesos a través de los cuales, los organismos obtienen información sobre el medio en el que viven y toman las decisiones necesarias para responder al entorno.

Un ejemplo es la vista. Los seres humanos y la mayoría de animales ven gracias a las ondas de la luz. Así pues, la luz se refleja en los objetos que les rodean y regresan al ojo permitiéndoles obtener imágenes sobre su entorno. Pero no es ésta la única capacidad de interpretación de nuestro entorno.

Así por ejemplo, existen algunos animales, como las ballenas o los murciélagos, que son capaces de orientarse y localizar a sus presas, aún en total oscuridad, gracias a un proceso llamado “ecolocación”. 

Para ello, emiten sonidos. Las ondas de estos sonidos se propagan a través del aire o el agua de modo que cuando chocan con los objetos que hay a su alrededor, las ondas cambian su dirección y llegan de nuevo al animal que las ha emitido. Con este método, consiguen saber la distancia que hay entre ellos y los elementos que les rodean.

En un principio se creía que este proceso ocurría porque estos animales eran ciegos y no podían ver, sin embargo, posteriormente se ha demostrado que esto no es así. Lo que sí que es cierto es que tienen el oído mucho más desarrollado que la vista.

Gabriel Barathieuhttp://commons.wikimedia.org/wiki/File:Mariana_fruit_bat_or_mariana_flying_fox_or_fanihi_animal_pteropus_mariannus.jpg?uselang=es




La distribución de los nutrientes

Para que los nutrientes lleguen a todas las células que conforman el organismo y poder realizar las funciones vitales entra en juego el sistema de transporte que es el que se encarga de la distribución de los nutrientes a todas las células del organismo. Este proceso se lleva a cabo de distinta forma dependiendo del tipo de organismo.

Así por ejemplo, en las plantas el proceso ocurre de modo que la savia bruta (compuesta por el agua y las sales minerales que han absorbido las raíces) es conducida hacia la parte superior de la planta  a través de unos conductos conocidos como xilema. Una vez en las hojas, la savia bruta se transforma gracias a la fotosíntesis en savia elaborada (compuesta principalmente por azúcares) la cual se distribuye a todas las partes de la planta a través de unos conductos llamados floema.

Por otro lado, el sistema de transporte en los animales se lleva a cabo gracias al aparato circulatorio. Éste es es el encargado de distribuir a todas las células las sustancias alimenticias y el oxígeno, y recoge, a su vez, los desechos metabólicos que se han de eliminar después por los riñones, en la orina, y por el aire exalado en los pulmones. De toda esta labor se encarga la sangre, que está circulando constantemente.

Aun así, existen animales muy sencillos que no poseen aparato circulatorio, llegando los nutrientes por difusión, como es el caso de los cnidarios.


viernes, 2 de enero de 2015

La nutrición heterótrofa

La nutrición heterótrofa es característica de los seres vivos que no tienen la capacidad de realizar la fotosíntesis. Éstos sólo pueden obtener la energía a través de la transformación de los alimentos y del oxígeno que toman del aire. La nutrición se lleva a cabo cuando los nutrientes, convertidos a sus formas más elementales, penetran en las células que conforman nuestro organismo.

Para ello, se requieren una serie de procesos, a través de los cuales, los nutrientes de los alimentos ingeridos son separados y transformados en macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono y lípidos) y micronutrientes (vitaminas y minerales) que son absorbidos y transportados a través de la sangre a todas las células de nuestro cuerpo.

Así pues, las fases que componen la nutrición heterótrofa se puede dividir en: 

- Incorporación de la materia orgánica del medio: Los organismos cuya nutrición es heterótrofa      necesitan de un aparato digestivo que transforme los alimentos ingeridos en moléculas  sencillas que puedan utilizar las células. Estas moléculas son luego transportadas por  el aparato circulatorio hasta llegar a   las células.

-  Utilización de la materia orgánica: A través de la cual se obtiene energía en forma de ATP, que es utilizada para mantener el funcionamiento del organismo.

-  Eliminación de las sustancias de desecho al medio: Proceso conocido como excreción, en el que se eliminan las sustancias que no son necesarias para las células.